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Las mascarillas faciales son cosméticos que aportan luz e intensifican la limpieza semanal de cualquier piel. Ayudan a eliminar impurezas, controlan la segregación de sebo y potencian un aspecto liso y sin imperfecciones. Las hay para todo tipo de pieles y con diferentes acciones (secante, calmante, antiedad, etc). Se recomienda su uso, al menos, una vez a la semana.
Tipos de mascarillas según tu tipo de piel
En función del tipo de piel que tengas te convendrá mejor una mascarilla u otra, ya que los ingredientes con los que las mascarillas estén formuladas influirá directamente en el resultado final. Por eso, queremos contarte cuál es la mascarilla ideal para tu tipo de piel.
Pieles maduras
Para las pieles maduras, lo ideal es utilizar mascarillas que sean ricas en ingredientes como el ácido hialurónico, vitaminas o retinol, ya que estos ingredientes ayudan a combatir los signos de la edad. Prueba con la Retinol Anti-Ageing Sheet Mask de Beauty Fórmulas.
Pieles mixtas o grasas
Para las pieles mixtas o grasas lo ideal son mascarillas que ayuden a regular el sebo o cerrar los poros, por lo que las mascarillas de arcilla o enriquecidas en ingredientes como las ceramidas, niacinamidas o glicerina son las más indicadas. Un buen ejemplo es la Silver Detox de Bielenda. ¡Te encantarán sus resultados!
Pieles normales
Las pieles normales, al no tener afecciones, deben prevenir su aparición principalmente, por lo que usar mascarillas faciales que consigan aportar un extra de luminosidad o hidratación nunca estará de más. Para ello, se recomienda usar mascarillas ricas en vitamina C, ácido hialurónico o ingredientes naturales. La mascarilla de The Saem es todo un acierto.
Pieles secas
Las pieles secas necesitan hidratación profunda, por lo que deben usar mascarillas ricas en manteca de karité, ácido hialurónico o ceramidas.¿Conoces la Mix It With Aloe de W7?
Pieles sensibles
Las pieles sensibles necesitan también de un extra de hidratación e ingredientes que no irriten, como la manzanilla, centella asiática, aloe vera o ceramidas. Descubre la mascarilla centella asiática de The Saem, te dejará la piel suave y firme.
Beneficios de usar mascarillas faciales
- Limpian en profundidad. Algunas de ellas son capaces de limpiar la piel en profundidad, absorbiendo impurezas y exceso de grasa. Limpian poros y consiguen una piel más limpia y sin imperfecciones. Este tipo de mascarillas son perfectas para las pieles grasas y mixtas.
- Hidratan la piel. Ideales para las pieles secas, estas mascarillas faciales ayudan a incrementar la hidratación de la piel, evitando la pérdida de humedad y la sequedad.
- Iluminan. Algunas tienen efecto iluminador y antiedad que aportan al rostro una sensación de glow increíble. Son las favoritas de las pieles maduras, cansadas o estresadas.
- Alisan arrugas. Hay mascarillas faciales antiedad que consiguen que tu piel se vea más joven y redensificada. ¡Le dirás adiós al paso del tiempo!
- Efecto flash. Son las favoritas de cualquier tipo de piel porque parecen mágicas. Sus fórmulas con alta concentración de activos preparan la piel para eventos importantes. Tu piel se verá radiante, lisa y sin imperfecciones.
¿Cuándo se aplica la mascarilla facial?
En cualquier rutina de limpieza, la mascarilla es el tercer paso. Se usa después del limpiador facial y del exfoliante, antes de aplicar cualquier tónico, booster o sérum.
El mejor momento para aplicar la mascarilla facial es por las noches, justo antes de dormir y cuando la piel se prepara para descansar. Sus efectos calmantes, purificantes e hidratantes las convierte en un esencial para lucir una piel de lo más sana, hidratada y firme.
Las mejores mascarillas faciales de Primor
En Primor tenemos las mejores mascarillas faciales del mercado y queremos compartirlas contigo. ¡Allá vamos!
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La Skin Active Mascarilla Facial Hidratante Revitalizante de Garnier es la favorita de nuestros primorosos ya que lo tiene todo: es vegana, enriquecida en ácido hialurónico y granada y consigue un resultado de piel rejuvenecida único.
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La Mascarilla Facial Antiedad de Hada Labo Tokyo es una mascarilla japonesa ideal para todo tipo de pieles, enriquecida con ingredientes rejuvenecedores y revitalizantes. ¡Presume de piel radiante!
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La mascarilla Ritual Japonés de Beauty Drops está enriquecida de las maravillosas algas wakame junto a la flor de cerezo y leche de arroz para hidratar, suavizar y rejuvenecer tu rostro. ¡No podrás resistirte a ella!
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La Mascarilla facial antiedad Hyaluron Cellular Filler de Nivea es otra joyita para tu cara, al estar enriquecida con colágeno y HA mejora la vitalidad de tu piel. ¡También puedes enfriarla en el frigo para un efecto más refrescante!
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La Mascarilla Facial de Péptidos Bio Solution de The Saem es otra mascarilla japonesa formulada en péptidos y muy reafirmante. ¡Te encantará!
Lo ideal es utilizarla una vez por semana o cada 15 días, según las necesidades de tu piel.
Todo dependerá de la mascarilla facial que uses, pero en términos generales, para que una mascarilla facial funcione, deberás dejarla actuar entre 15 y 20 minutos. Aunque en otros casos, podrás dejarla toda la noche.
Aunque pueda parecer redundante, lo ideal tras una mascarilla facial, sea esta hidratante, antioxidante o del tipo que sea, es utilizar crema hidratante. De esta manera se consigue mantener los ingredientes activos que presenta la mascarilla al sellar y mantener el agua presente en la piel, ejerciendo de barrera protectora y consiguiendo así un resultado más óptimo y completo.
Las mascarillas que no son buenas para la cara generalmente contienen ingredientes que pueden irritar, secar o afectar a la piel. Debes tener en cuenta tu tipo de piel a la hora de elegir la mascarilla adecuada; sin embargo, por lo general, aquellas mascarillas que contienen ingredientes como el limón, los sulfatos, alcohol, parabenos o fragancias fuertes, ya que suelen dañar la piel.
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