¿Sabías que una molécula de ácido hialurónico puede soportar hasta 1.000 veces su peso en agua y un gramo hasta seis litros de agua? Esa es una de las razones que lo han convertido en el ingrediente estrella de la cosmética y la medicina estética, ya que tiene la capacidad de rellenar arrugas y rejuvenecer el aspecto. Además, gracias a su alta tolerabilidad, es apto para todo tipo de pieles, incluyendo las más sensibles, atópicas y reactivas.
Beneficios de usar ácido hialurónico
Es un ingrediente muy beneficioso que:
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Mantiene la estructura de la piel, haciendo que nuestro rostro se vea más firme y terso.
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Rellena arrugas y líneas de expresión desde el interior.
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Aporta un extra de hidratación a la piel frente a factores externos que puedan deshidratarla o debilitarla, además de retener la humedad.
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Facilita la reparación celular, por lo que previene el envejecimiento prematuro.
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Fomenta que nuestra piel se vea hidratada, elástica y vital.
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Estimula la producción de colágeno.
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Facilita la absorción de otros productos, así como la cicatrización.
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Reduce la apariencia de los poros, mejora la textura de la piel y la barrera cutánea.
Ácido hialurónico reticulado vs Ácido hialurónico no reticulado
Al ser el activo más demandado por la medicina estética debido a su tolerabilidad y eficacia, surge el ácido hialurónico reticulado. ¿En qué se diferencia del ácido hialurónico no reticulado? Sigue leyendo, que te lo explicamos a continuación:
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Ácido Hialurónico Reticulado. Es el mejor aliado para tu rostro y está formado por una serie de moléculas que crean una estructura en forma de malla al unirse entre sí. Se inyecta, es más denso y dura más. Se emplea en tratamientos de medicina estética destinados a aumentar el volumen o rellenar un espacio.
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Por otro lado, el ácido hialurónico no reticulado tiene un efecto más natural, empleado generalmente como suplemento para nutrir la piel. Es una sustancia fluida y volátil que dura menos porque se degrada con facilidad al no estar unidas sus moléculas y circular de forma más superficial. Uno de los tratamientos más frecuentes con este tipo de AH es la hidratación de labios.
El ácido hialurónico a cada tipo de edad
El paso del tiempo no pasa en balde a nadie. Factores como la genética, el estilo de vida o las necesidades de cada piel influyen directamente en el envejecimiento de la piel y los expertos en belleza y medicina estética recomiendan el uso del ácido hialurónico adecuado para hacerlo de la mejor manera posible. ¡Te lo contamos!
A partir de los 20
En las pieles jóvenes lo más importante es la prevención. Mantén unos hábitos saludables y acostúmbrate a una buena higiene facial que elimine impurezas. Para ayudar a la hidratación de tu piel, puedes utilizar cremas con ácido hialurónico que sean ligeras y que le aporten ese extra de agua que tu rostro pueda necesitar.
A partir de los 30
A los 30 empieza la guerra. Empezarás a notar el paso del tiempo y los primeros signos de la edad como las líneas de expresión. Que no cunda el pánico. Sigue manteniéndola hidratada y ayúdate de la cosmética moderna, que mezcla ácido hialurónico de bajo y alto peso molecular.
A partir de los 40
A partir de esta edad los principales problemas siempre serán la flacidez de la piel y la aparición de arrugas más profundas. Hay quienes deciden recurrir a la medicina estética e inyectarse ácido hialurónico. Es una forma más inmediata de que surja el efecto inmediato. Aunque para el día a día, las cremas con ácido hialurónico y una buena higiene facial seguirán siendo tus mejores aliados.
Los mejores tratamientos con ácido hialurónico
A pesar de que cada tipo de piel tiene unas carencias y necesidades diferentes, los cosméticos y tratamientos con ácido hialurónico son un gran aliado que nos ayuda a mitigar los efectos de la edad. Nuestro TOP 5 son:
El ácido hialurónico es una molécula de azúcar que se encuentra de forma natural en nuestra dermis y que se caracteriza por ser amante del agua. Esto hace que posea grandes propiedades hidratantes ya que es capaz de retener la humedad en nuestra piel.
El ácido hialurónico de tipo tópico es un poderoso compuesto capaz de tratar las capas superficiales de la dermis. Esto se debe a que sus moléculas son tan pesadas que no pueden penetrar fácilmente en la piel. No obstante, es un humectante capaz de aportar grandes niveles de hidratación al rostro, mejorar su elasticidad, rellenar arrugas y retener el agua en nuestra piel.
Siempre que verdaderamente lo necesites y notes tu piel muy deshidratada puedes usarlo hasta dos veces cada día. Esto dependerá en gran parte del tipo de producto que emplees y la formulación que contenga. Por ello, es fundamental seguir las indicaciones del fabricante y asegurarte de aplicarlo de forma adecuada.
A la hora de aplicar ácido hialurónico es importante asegurarnos de hacerlo de una forma adecuada. El tipo de aplicación dependerá del tipo de producto que empleemos. Por ello es fundamental seguir siempre las indicaciones del fabricante. Si se trata de ácido hialurónico puro, los expertos nos recomiendan humedecer primero la cara ya que este compuesto necesita reservas de agua de las que tirar. Además, es imprescindible acabar con una buena hidratante que lo selle.
El ácido hialurónico es una molécula naturalmente presente en nuestros tejidos, por lo que es compatible con todo tipo de pieles. Sin embargo, hay unas dermis que lo necesitan más que otras. A partir de los 20 años debemos comenzar a generar hábitos que nos ayuden a prevenir la aparición de arrugas, por lo que es fundamental comenzar a incorporar ácido hialurónico a nuestra rutina desde este momento. Las pieles maduras también se ven enormemente beneficiadas de este compuesto ya que les ayuda a rellenar arrugas. Y si tienes el cutis seco o deshidratado no te olvides de tener productos con ácido hialurónico en tu neceser.
En función de tu piel, será más beneficioso el uso de unos productos cosméticos de ácido hialurónico u otros, claro está. Sin embargo, hay 3 marcas principalmente que recomiendan la mayoría de dermatólogos a la hora de utilizar el ácido hialurónico: Cerave, Isdin y La Roche Posay. ¡Descubre sus productos en Primor!
Tanto el sérum como el ácido hialurónico son dos imprescindibles en tu rutina facial, ya que aportan múltiples beneficios a tu piel, siendo la principal diferencia entre ellos los ingredientes que los componen, haciendo que la textura sea diferente. Mientras que el sérum se presenta como un producto más líquido, el ácido hialurónico es más denso, contribuyendo también a mejorar la elasticidad de la piel. Lo ideal es combinarlos juntos. ¡Descubre nuestros sérums con ácido hialurónico!
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