Importancia del comedero en el día a día de nuestras mascotas
El comedero es una pieza fundamental en la vida de nuestros perros y gatos. Por ello, es importante aprender a identificar cuales son los diseños que mejor se adaptan al tamaño, las necesidades y la forma de comer de nuestras mascotas.
Tipos de comederos para perros
Cuando se trata de perros, tenemos que tener en cuenta que nuestro comedero debe estar adaptado a la altura, el tamaño del hocico y su carácter para garantizar la máxima comodidad de nuestros canes. Aquí te dejamos una guía de los tipos de comederos más comunes:
- Comederos de plástico. Son fáciles de limpiar y suelen tener un precio más asequible. Es importante optar siempre por plásticos de alta calidad ya que de lo contrario, pueden contaminar la comida con tóxicos.
- Comederos de cerámica. Existen en un sinfín de tamaños y formas. Este material es más difícil de limpiar y requiere mayor atención en caso de que se agrieten y desprendan lacas.
- Comederos de acero inoxidable. Son fáciles de limpiar y desprenden tóxicos que puedan contaminar los alimentos. Sin embargo, la saliva de los animales puede deteriorarlos.
- Comederos transportables. Se trata de recipientes plegables de silicona ideales para las excursiones y las salidas largas ya que son ligeros y fáciles de portar.
- Comederos automáticos. Para muchos son un salvavidas. Estos comederos son ideales para quienes pasan mucho tiempo fuera de casa ya que permiten programar las raciones de comida necesarias para nuestros canes.
- Comederos elevados. Son la opción perfecta para los perros de razas grandes. Estos favorecen la postura del animal y ayudan a mantener la zona de los comederos higiénica.
- Comederos antivoracidad. Son ideales para los perros que padecen ansiedad por la comida. Estos poseen relieves que ayudan a que los perros coman más despacio y evitan la aparición de trastornos digestivos.
- Comederos profundos. Son ideales para los perros con el hocico largo como los galgos, bullterrier, pastores alemanes o labradores.
- Comederos poco profundos. Son la mejor opción para los perros con el hocico chato como los bulldog, boxers o mastines.
Tipos de comederos para gatos
Si por algo se caracteriza la personalidad de los gatos, es por su inclinación a la pulcritud y su facilidad para estresarse. Por ellos, es fundamental escoger comederos anchos que no ejerzan presión en sus bigotes y cuidar siempre la higiene. Además, no se recomienda el uso de comederos dobles ya que les desagrada que el agua pueda estar sucia.
- Comederos de plástico. Son una de las opciones más comunes y asequibles. Es importante adaptar el tamaño a las necesidades de nuestros felinos y escoger siempre plásticos de calidad para evitar alergias y contaminaciones.
- Comederos de cerámica. Son una gran opción por su versatilidad. Sin embargo, son más difíciles de limpiar por la porosidad de este material.
- Comederos de acero inoxidable. Se han convertido en uno de los favoritos gracias a su resistencia y la facilidad para limpiarlos. Además, este material posee un menor riesgo de contaminar los alimentos.
- Comederos automáticos. Son ideales para quienes pasan poco tiempo en casa ya que nos permiten programar las raciones de comida que nuestros felinos necesitan. Además, mantienen la comida en perfecto estado gracias a sus cierres herméticos.
- Comederos interactivos. Normalmente, los gatos pasan sus días sin salir al exterior. Un hecho que hace que necesiten una mayor estimulación mental y actividad física. Estos comederos están diseñados para que nuestros felinos desarrollen sus habilidades mientras consiguen extraer la comida de diferentes obstáculos.
- Comederos elevados. Son ideales para corregir la postura de los gatos y evitar que se tumben junto a la comida. Además, favorecen su movilidad y ayudan a evitar situaciones de estrés.
- Comederos antivoracidad. Es común que los felinos desarrollen ansiedad por la comida, especialmente si están esterilizados. Estos comederos son un gran aliado para ralentizar la ingesta de alimentos y disminuir la cantidad de alimentos consumidos.
Ventajas de elevar el comedero de nuestros gatos y perros
Estamos acostumbrados a colocar el comedero directamente en el suelo. Pero, ¿es esta la mejor opción para nuestras mascotas? Desde esta posición obligamos a nuestros perros y gatos a flexionar notablemente la columna y el cuello para acceder a la comida. Una postura que puede desencadenar graves lesiones y actitudes insanas a la hora de comer. Aquí te dejamos algunas de las ventajas de elevar el comedero de nuestras mascotas:
- Les ayuda a tragar y comer más despacio. Esto favorece su ciclo digestivo y ayuda a prevenir que aparezca la voracidad.
- Mejora su postura y comodidad. Desde esta posición están más cómodos y relajados por lo que prevenimos afecciones digestivas y en su columna.
- Evita que los alimentos se contaminen. Al distanciar el comedero del suelo ayudamos a prevenir que la suciedad y los gérmenes se depositen en su comida.
- Evita que se acuesten al lado de la comida y que coman tumbados. Si nuestra mascota ingiere alimentos tumbada puede desarrollar problemas digestivos.
- Facilita que el comedero se quede estable en su lugar. Muchas mascotas desarrollan el hábito de desplazar los comederos o jugar con ellos. Si los elevamos prevenimos estas situaciones.
- Proporciona una mayor comodidad para recargarlos. Al elevarlos, facilitamos su acceso y evitamos tener que agacharnos en exceso cuando tenemos que rellenarlos.
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