Si te has hecho un tatuaje, es posible que tengas dudas sobre ciertos aspectos que van surgiendo a lo largo de su proceso de curación, incluso después. Lo más importante es seguir las indicaciones de tu tatuador para que siga manteniéndose intacto (y durante más tiempo). Los primeros días son cruciales –y por eso te dejamos estos consejos–. Sin embargo, también puede pasar que esté sobrehidratado. Te contamos todo lo que debes saber acerca de los tatuajes sobrehidratados para que consigas devolverlo a su estado natural y que dure lo máximo posible.
Qué son los tatuajes sobrehidratados y cuáles son sus síntomas
Un tatuaje sobrehidratado se refiere a una situación en la que el área tatuada retiene demasiada humedad, lo que puede tener algunos efectos negativos en el proceso de curación del tatuaje. Esto puede suceder cuando el tatuaje recibe demasiada crema hidratante o cuando se cubre con un vendaje o apósito durante demasiado tiempo, impidiendo que la piel respire adecuadamente.
Síntomas de tatuaje sobrehidratado
- Piel hinchada o inflamada. Si notas que la piel alrededor del tatuaje está hinchada o inflamada, podría ser un signo de que el tatuaje está reteniendo demasiada humedad.
- Exceso de secreción de líquido. Un tatuaje sobrehidratado puede producir más líquido de lo normal, lo que puede aparecer como un exudado claro o ligeramente teñido de color en el área del tatuaje.
- Formación de ampollas o granos. El exceso de humedad puede provocar la formación de ampollas o granos en el área del tatuaje, lo que puede causar molestias y retrasar el proceso de curación.
Qué hacer si mi tatuaje está sobrehidratado
- Limpieza suave. Lava el tatuaje con agua tibia y un jabón suave para eliminar cualquier residuo de crema hidratante o exudado. Sécalo con palmaditas suaves con una toalla limpia y suave.
- Deja que la piel respire. Deja el tatuaje al descubierto durante períodos de tiempo más largos para permitir que la piel respire adecuadamente. Evita cubrir el tatuaje con vendajes o apósitos a menos que sea absolutamente necesario.
- Aplica una cantidad adecuada de crema hidratante. Si decides hidratar el tatuaje, asegúrate de aplicar una cantidad moderada de crema hidratante recomendada por tu tatuador. Evita aplicar demasiada crema, ya que esto puede contribuir al problema del tatuaje sobrehidratado.
- Consulta a tu tatuador o a un dermatólogo. Si estás preocupado por el estado de tu tatuaje o si experimentas complicaciones como infección, enrojecimiento intenso o dolor persistente, es importante consultar a tu tatuador o a un dermatólogo lo antes posible para obtener orientación y tratamiento adecuados.