Antes de nada vamos a contarte qué es el inflammaging, porque es un término que se ha puesto muy de moda, y es muy probable que hayas oído hablar de él. El inflammaging es un término que combina inflammation (inflamación) y aging (envejecimiento) para describir la inflamación crónica de bajo grado que se desarrolla y persiste en el cuerpo con el tiempo, contribuyendo al proceso de envejecimiento y a muchas enfermedades relacionadas con la edad, como la diabetes, la artritis, enfermedades cardíacas y el Alzheimer. A diferencia de la inflamación aguda, que es una respuesta temporal y beneficiosa del sistema inmunológico, el inflammaging es silencioso y persistente, causando daño acumulativo en los tejidos y órganos. Es por eso que (quizás) hayas oído hablar de los suplementos para el inflammaging. Pero ¿funcionan? ¿Son buenos? Es lo que te contamos en este artículo de Primor.
La verdad de los suplementos para el inflammaging
Hablamos de suplementos populares formulados para ayudar a reducir la inflamación y promover la salud de las articulaciones y los músculos. Contiene ingredientes naturales que tienen propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y que pueden apoyar el sistema inmunológico. Algunos de sus ingredientes más populares son:
- Cúrcuma (Curcumina). Conocida por sus fuertes propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. La curcumina puede ayudar a reducir el dolor articular y la inflamación en general. Para mejorar su absorción, se suele combinar con bioperina (extracto de pimienta negra).
- Boswellia Serrata. Un extracto herbal que ha mostrado efectos positivos para reducir la inflamación, especialmente útil en problemas de articulaciones y condiciones como la artritis.
- Jengibre. Posee efectos antiinflamatorios y antioxidantes, y ayuda a reducir el dolor muscular y la rigidez.
- Quercetina. Un flavonoide con propiedades antiinflamatorias, también actúa como antioxidante y puede ayudar a proteger las células contra el daño.
- Bromelina. Esta enzima, que se encuentra en la piña, ayuda a reducir la inflamación y es útil especialmente para quienes sufren de inflamación muscular y articular.
- Ácidos grasos Omega-3. Los Omega-3, presentes en el aceite de pescado o aceite de kril, ayudan a combatir la inflamación en todo el cuerpo.
- Vitamina D3 y Vitamina C. Estas vitaminas son esenciales para el sistema inmunológico y tienen propiedades antioxidantes que ayudan a reducir la inflamación.
Otros suplementos que pueden ayudarte
- Magnesio, ya que ayuda a reducir la inflamación y es clave para la relajación muscular y la función de las articulaciones.
- Probióticos. Los problemas digestivos pueden contribuir a la inflamación. Los probióticos ayudan a mantener la salud intestinal, lo cual podría reducir la inflamación sistémica.
- Resveratrol. Un antioxidante que ayuda a reducir el daño celular y la inflamación.
- Extracto de té verde. Contiene catequinas y otros antioxidantes que pueden ayudar a reducir la inflamación y mejorar el metabolismo.