¿Tú también notas que tu pelo no está en forma? Pues esto te interesa: te contamos en este artículo de Primor cuáles son las mejores soluciones para el pelo quemado y por qué sucede para evitar que te vuelva a pasar. Vamos allá.
Por qué se quema el pelo
Por muchas razones, entre ellas:
- Exposición al calor excesivo. Amiga, lo que nos gusta la plancha, pero se te van a quitar las ganas cuando te diga que el uso frecuente de herramientas de calor como secadores de cabello, planchas y rizadores puede dañar la cutícula del cabello y provocar quemaduras. El calor extremo debilita y seca el cabello, haciendo que se vuelva quebradizo y propenso a quemarse.
- Productos químicos, como los tintes para el cabello, los decolorantes y los tratamientos químicos, son famosos por dañar la estructura del cabello y provocar quemaduras. Sí, también. Ten en cuenta que estos productos pueden eliminar los aceites naturales del cabello y debilitar su estructura, haciéndolo más propenso a daños por calor y roturas.
- Sobreprocesamiento con tratamientos químicos frecuentes, como alisados permanentes o permanentes, también debilitan la estructura del cabello y hacer que se queme con mayor facilidad.
- Exposición al sol. Ojo, esto no significa que no puedas tomar el sol, solo que lo hagas con protección, para que no esté desprotegido. Los rayos UV pueden rompen la cutícula del cabello y causan daños en la superficie, haciendo que el cabello se vuelva quebradizo y sea más fácilmente propenso a quemarse.
- Falta de cuidado. Todas pensamos que nos cuidamos el pelo, hasta que nos damos cuenta que no tanto como creíamos. La falta de cuidado adecuado del cabello, como no usar acondicionador, no proteger el cabello antes de la exposición al calor o no recortar las puntas dañadas, puede hacer que el cabello sea más vulnerable a los daños por quemaduras.
Soluciones para el pelo quemado
- Recortar las puntas. Tranquila, que hablamos del concepto de puntas "de verdad". Si solo algunas partes del cabello están quemadas, recortar esas secciones puede ayudar a eliminar el daño y prevenir que se extienda a otras partes del cabello.
- Tratamientos de proteínas. Los tratamientos de proteínas pueden ayudar a fortalecer el cabello dañado y mejorar su apariencia. Por lo que, la clave está en buscar productos con ingredientes como queratina, proteínas de trigo o de seda, que ayudan a reparar y fortalecer el cabello.
- Hidratación profunda. Utiliza acondicionadores y mascarillas hidratantes profundas para ayudar a restaurar la humedad perdida en el cabello quemado. Busca productos que contengan ingredientes como aceite de argán, aceite de coco o manteca de karité.
- Evita el calor. Evita usar herramientas de calor como secadores de cabello, planchas o rizadores mientras el cabello se está recuperando. El calor adicional puede empeorar el daño.
- Cuidado al peinar. Sé suave al peinar y desenredar el cabello para evitar más daño. Adiós a los tirones que te daba tu madre. Nosotras te recomendamos utilizar un peine de dientes anchos o tus dedos en lugar de cepillos que puedan causar más roturas.
- Suplementos nutricionales. Ojo a la nutricosmética capilar, que puede ayudarte más de lo que crees. Algunas vitaminas y suplementos, como la biotina o los ácidos grasos omega-3, pueden ayudar a promover el crecimiento del cabello saludable y fortalecerlo desde adentro.
- Consulta a un profesional. Siempre, sobre todo, si el daño es severo o no mejora con los tratamientos caseros.