Existen ejercicios para el posparto que te pueden ayudar a recuperarte después de haber dado a luz. Se trata de ejercicios ayudan a que el cuerpo vuelva a su forma habitual. Esto mejora la salud y también hace que se fortalezcan algunos tejidos que se transforman durante el embarazo y el parto. Eso sí, lo mejor es que no te obsesiones y confíes en tu cuerpo. Un parto es algo totalmente natural y, por ello, hay que tener en cuenta que igual que el cuerpo se modifica, vuelve a su forma natural.
Durante el posparto, no fuerces demasiado
Lo que deberías tener en cuenta durante el posparto es que es un periodo demandante y puedes estar cansada algunos días. La lactancia y la atención que necesita tu bebé puede llegar a ser muy demandante. Esto incluye a veces falta de sueño o cansancio extremo. Por ello, es bueno que tengas en cuenta que será beneficioso que hagas ejercicio pero sin forzar tu cuerpo ni agotarte.
Además una de las claves más importantes que es bueno tener en cuenta a nivel físico es que el cuerpo es sabio. Esto es porque a menudo puedes notar señales de que tu cuerpo se fuerza o duele con ciertos ejercicios. Si esto ocurre, es mejor escucharlo y no forzar demasiado.
Ejercicios para el posparto
Aquí van algunos ejercicios para el posparto que podrás hacer sin problema en la mayoría de los casos teniendo en cuenta lo que acabamos de comentar:
Caminatas
Las caminatas son uno de los ejercicios más inocuos y saludables que se pueden hacer. De hecho, si tienes cerca un gran parque o naturaleza, hacer caminatas en lugares naturales hará que a la vez que te ejercitas puedas respirar aire fresco.
Las caminatas te ayudarán a reducir el riesgo de trombosis y en la pérdida de peso postparto. Además, mejoran la circulación del cuerpo en general. Aunque pueda parecer que fortalecen menos el cuerpo que otros ejercicios, las caminatas te ponen a punto y fortalecen zonas del cuerpo como las piernas o el abdomen, sobre todo cuando hay cuestas. Puedes comenzar con ritmo suave e ir cogiendo fondo para hacerlas más intensas.
Ejercicios de respiración
Son otra alternativa suave y que difícilmente pueda hacerte daño. Simplemente con algunos ejercicios de respiración puedes mejorar la función pulmonar y fortalecer los músculos abdominales. Pero, además, te ayudarán a relajarte en los casos en los que la crianza se haga demandante o hayas dormido poco y te sientas abrumada.
Para hacerlos, siéntate o acuéstate en una posición cómoda. Inhala profundamente, llenando tu abdomen de aire, y luego exhala lentamente cada vez. Puedes añadir la contracción del abdomen al exhalar para activar los músculos abdominales si no tienes molestias o no te estás recuperando de una cesárea. Haz tantas repeticiones como quieras. Puedes ponerte una meditación guiada o música para hacerlo más agradable.
Ejercicios de suelo pélvico
Cuando ya estés más recuperada puedes comenzar a realizar ejercicios de suelo pélvico. Para ello debes contraer los músculos del suelo pélvico. Hazlo como si estuvieras deteniendo el flujo de orina. La idea es mantener la contracción durante cinco u ocho segundos. Después relaja. Repite de 10 a 15 veces. Puedes hacerlo incluso dos veces al día.
Ejercicios de core
Para conseguir que se recuperen los músculos abdominales y lumbares. Uno de ellos es la inclinación pélvica. Acuéstate boca arriba, dobla las rodillas y empuja la pelvis hacia el ombligo, manteniendo la espalda baja en el suelo. Haz unas ocho repeticiones. Puedes hacerlo dos veces al día.
Yoga postnatal
Que además de ayudarte con la recuperación del cuerpo, lo hará con la de la mente y las emociones más estresantes. Practica posturas suaves y adaptadas al postparto, como el gato-vaca, la postura del niño o el guerrero. Puedes hacerlo en casa o apuntarte a alguna escuela especializada.
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