El herpes labial es un problema muy común. Es también molesto y puede causarnos complejo si perdura algunos días. Sobre todo en el caso de las mujeres, además de las molestias que puede generar el herpes labial, limita a la hora de usar maquillaje o labial, ya que se contagia fácilmente. Si usas labial, lo mejor es no hacerlo mientras tengas un herpes labial. El hecho de que lo hagas, puede provocar que después se contagie de nuevo o se extienda cuando uses la misma barra de labios.
Por qué sale el herpes labial
Aunque no tiene mayor gravedad, es importante saber que el herpes labial es causado por un virus. Suele aparecer alrededor de los labios y en las zonas superior o inferior de la comisura. Los herpes están causados generalmente por el virus del herpes simple de tipo 1.
Estos herpes pueden surgir por contagio, es decir, por transmisión de otra persona que lo tenga. También si se comparten cosméticos labiales o bebidas con alguien que lo esté atravesando o tenga indicios.
Uno de los desencadenantes de que se dé el herpes labial es el estrés. Ya se trate de estrés físico o emocional, las defensas bajan cuando estamos en situaciones de estrés y esto puede hacer que el virus se reactive si ya lo has sufrido.
Sufrir enfermedades que debilitan el sistema inmune también puede ser causa de sufrir un herpes labial. Desde una gripe o resfriado hasta enfermedades más graves. También algunos cambios hormonales como los que se dan durante la menstruación, la menopausia o el embarazo.
Por último, hemos de tener en cuenta que la radiación ultravioleta del sol puede desencadenar brotes de herpes labial. Los labios son particularmente vulnerables a los efectos del sol al ser una zona sensible de nuestro cuerpo.
Cómo tratar el herpes labial
Las formas de tratar el herpes labial más efectivas son las específicas. Hay numerosos tratamientos para acabar con él en el mercado. Lo más importante es tener en cuenta que es importante tratarlo para no contagiar o que se reactive. Se puede hacer a través de estas vías:
- Tomando tratamientos antivirales: como aciclovir, valaciclovir y famciclovir. Estos pueden ser aplicados de forma tópica (cremas) o tomados por vía oral. La última opción se recomienda solamente en casos severos para reducir la duración y severidad de los brotes.
- Usando tratamientos para el herpes labial: esta es la forma más indicada. Se trata de productos que contienen docosanol o lidocaína, además de otras soluciones específicas para el herpes labial y que pueden proporcionar un alivio sintomático además de contribuir a que desaparezca el herpes.
- Con analgésicos y antiinflamatorios: aunque esta opción es solamente recomendable cuando estos se toman para curar otra enfermedad mientras se tiene el herpes labial. Estos pueden contribuir a que se reduzcan el dolor y la inflamación como efecto secundario en el herpes labial.
- Con aceites esenciales naturales como el árbol del té por sus propiedades.
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