Para saber cómo evitar el sudor nocturno, además de conocer las claves para evitarlo o atenuarlo, es importante tener en cuenta las causas que lo provocan. Para resolver un problema que tiene que ver con el bienestar físico, emocional o mental esto siempre es así. Conociendo la raíz puedes acabar con el problema y no solo con el síntoma. El sudor nocturno es normal en verano, por ejemplo, y en determinados momentos de la vida de una mujer como la menopausia. No obstante, hay personas que tienen el problema del sudor nocturno aunque la causa no sea ninguna de las anteriores. Vamos a ver las causas que lo provocan y cómo solucionarlo.
Sudor nocturno: causas
Como hemos comentado, el sudor nocturno tiene diversas causas. Vamos a ver cuáles son algunas de ellas para que puedas identificar cuál es la que los causa en tu caso. Son estas:
- Menopausia: el sudor nocturno provocado por los sofocos es un síntoma de esta etapa de la vida de la mujer. Se debe al cambio hormonal y no tienes porqué preocuparte. Después te recomendamos una solución si este problema es muy incómodo para ti o te causa malestar o incomodidad.
- Hipertiroidismo: cuando se sufre de hipertiroidismo puede que se dé sudor nocturno excesivo. Esto es porque cuando el metabolismo sufre de este desequilibrio está demasiado activo, lo que puede traducirse en calor excesivo y sudores nocturnos. Si sospechas que este puede ser tu caso, acude al médico para que te prescriba unos análisis y te ponga en tratamiento.
- Estrés o ansiedad: lo que ocurre en la mente y en el campo emocional, se manifiesta en el cuerpo. Cada vez hay más evidencias sobre esto y en el caso del sudor nocturno, ocurre lo mismo. La hiperactividad mental hace que el sistema nervioso se acelere y puede manifestarse en forma de sudor nocturno.
- Ingesta de ciertos alimentos, cafeína o alcohol: las sustancias estimulantes como el alcohol y la cafeína u otros estimulantes hacen que el cuerpo eleve su frecuencia cardiaca y podamos sufrir sudor nocturno. La ingesta de alimentos que producen calor en el cuerpo como los picantes, también puede provocarlos.
- Medicación: algunas medicaciones también pueden ser causa de sudor nocturno. Consulta con tu médico para comprobar que este es el caso si estás siguiendo algún tratamiento o tomando medicación.
- Infecciones: las infecciones hacen que se active el sistema inmune y que, en algunos casos, se tenga algo de fiebre. Esta es otra causa del sudor nocturno.
Trucos para evitar el sudor nocturno
Una vez que sabes cuáles pueden ser las causas y la raíz del sudor nocturno en tu caso, vamos a ver qué soluciones existen para paliar el problema a corto plazo:
- Dormir con ropa de tejidos naturales: tanto en tu cuerpo como en el caso de la ropa de cama. Tejidos naturales como el lino, la seda o el algodón son transpirables a diferencia de los sintéticos que no dejan lugar a la transpiración.
- Hidratación adecuada: es importante que bebas agua y te hidrates durante el día para evitar una sudoración excesiva durante la noche.
- Evitar alimentos y bebidas que los provocan: como el alcohol, las cafeínas y los estimulantes y los alimentos y especias picantes. Si el problema es una medicación excesiva, también es bueno revisarla con el médico.
- Hacer ejercicio y técnicas de relajación: una rutina de ejercicios diarios o técnicas de relajación harán que nuestro descanso nocturno sea más apacible y que descienda nuestro nivel de estrés. Además, la práctica de ejercicio habitual regula el cuerpo y sus funciones.
- Ventilación adecuada: sobre todo en épocas del año en las que hace más calor, te puede ayudar abrir algunas ventanas de la casa para que se genere una corriente de aire en la habitación.