Una rutina de noche y rutina de día se diferencian en varias cosas. Tu piel no tiene las mismas necesidades a una hora del día que a otra, al igual que no va a aprovechar unos tratamientos concretos de igual forma cuando te vas a acostar que cuando te levantas. Por eso, vamos a ver cuáles son los requerimientos de una rutina de noche y rutina de día y las diferencias que hay entre ellas.
Rutina de noche y rutina de día: diferencias entre ambas
La rutina de noche y una rutina de día se diferencian sobre todo, en la finalidad que tiene cada una de ellas. Mientras que en la rutina de día necesitas menos limpieza, porque vienes de dormir y limpiaste tu rostro a fondo la noche anterior, necesitas protector solar si sales a la calle, por ejemplo. En la rutina de día lo que necesitas es hidratar la piel y protegerla del sol y de los factores externos.
Para ello, debes hacer énfasis tras una limpieza sencilla con un producto suave y enfocado a limpiar el exceso de grasa, equilibrar el pH con un tónico. Después del tónico llega el momento de usar cremas hidratantes o sérums con activos como la vitamina C, que son antioxidantes y dan a tu piel un aspecto de luminosidad y descanso, además de proteger a tu cutis de los radicales libres. Después es cuando se aplica el protector solar y siempre es el último paso.
Sin embargo, la rutina de noche necesita de una doble limpieza. La primera con base de aceite y si has usado maquillaje, sobre todo. La segunda limpieza debe ser con base de agua y algún jabón o limpiador que se centre en dejar los poros limpios.
Una vez que has llevado a cabo la limpieza, llega la hora de usar el tónico para equilibrar de nuevo el pH de tu piel. Además, este paso permitirá que los activos y productos que uses después penetren mejor en tu piel.
Por la noche es la hora de usar activos anti arrugas o reparadores de manchas o sérums de reparación celular. Por ello, es el momento de usar productos que lleven retinol o niacinamida para aprovecharlos por completo. También puedes usar ácido hialurónico para mantener tu piel altamente hidratada durante toda la noche, aunque este activo puede estar en tu rutina de día si ya tienes edad de usar retinol. El retinol siempre se usa de noche porque puede ser peligroso por el día y con la exposición al sol.
Rutina de noche y rutina de día: cómo afectan a tu rostro
Aunque viendo los pasos en los que deberías enfocarte en la rutina de noche y rutina de día, hayas podido observar algunas diferencias, vamos a dejar claro cuál es el objetivo de cada una y cómo afectan a tu rostro.
- Rutina de día: busca proteger la piel de factores externos y daños futuros como la oxidación o la exposición al sol y los daños que este puede causar, como las manchas o arrugas de más. Por ello hacemos énfasis en los productos antioxidantes y el protector solar.
- Rutina de noche: está enfocada en corregir los daños que ya están presentes en tu piel. Estos pueden ser arrugas o manchas, por ejemplo. Por ello es por la noche cuando se recurre a activos como el retinol o los ácidos. Por la noche se da una mayor reparación celular debido al descanso, por ello aprovechamos también a que la piel aproveche estos productos. Además, hay que tener en cuenta que en la mayor parte de los casos la noche es cuando más tiempo tenemos para nuestras rutinas beauty, ya que ha acabado el día y con él, las obligaciones.