A la hora de hacernos la manicura, contar con las herramientas necesarias es imprescindible para unos resultados duraderos, bonitos y profesionales. Hoy hablamos de una de las más infravaloradas (y necesarias): el palito de naranja. Te contamos qué es y por qué deberías tenerlo muy presente.
¿Qué es el palito de naranja?
El "palito de naranja" para uñas es una herramienta comúnmente utilizada en el cuidado de las uñas durante los procedimientos de manicura y pedicura. Aunque su nombre hace referencia a una naranja, el instrumento no está hecho de esa fruta, sino que recibe su nombre debido a su forma y, a menudo, a su color naranja.
El material del palito de naranja suele ser madera o plástico y su diseño ergonómico permite un uso preciso y delicado alrededor de las uñas sin dañar la cutícula ni la superficie de la uña. Es una herramienta comúnmente utilizada por profesionales de la manicura en salones de belleza, así como por individuos en el cuidado personal de las uñas en casa.
Tipos de palitos de naranjo
Lo único que cambia en cuanto a la tipología de esta herramienta de uñas es el final, que puede ser:
- Punta en ángulo plano o puntiaguda. Este extremo se usa para empujar las cutículas hacia atrás suavemente. Ayuda a mantener las cutículas alejadas de la base de la uña para mejorar la apariencia estética y facilitar la aplicación del esmalte.
- Punta afilada o en punta. Esta parte es más puntiaguda y suele ser utilizada para limpiar debajo de las uñas o para eliminar cualquier exceso de esmalte o residuos que hayan quedado alrededor de los bordes de las uñas.
¿Qué función tiene el palo de naranjo?
Como ya hemos mencionado anteriormente la función principal del palito de naranja es facilitar el cuidado de las uñas y las cutículas. Ayuda a empujar suavemente las cutículas para mantenerlas limpias y bien arregladas, al tiempo que permite limpiar y eliminar residuos alrededor de las uñas para lograr una apariencia pulcra y terminada después de la manicura o pedicura.
Cómo usarlo paso a paso
La limpieza y el cuidado de las uñas deben hacerse con suavidad y precaución para evitar dañar las cutículas o la uña misma. Si experimentas dolor o molestias, detén el proceso inmediatamente y consulta a un profesional de la belleza o un dermatólogo. No obstante, el paso a paso a la hora de utilizar un palito de naranja es bastante sencillo.
- Lava tus manos o sumerge las uñas en agua tibia para suavizar las cutículas antes de comenzar. Esto facilitará el empuje de las cutículas hacia atrás.
- Asegúrate de que tus manos y uñas estén completamente secas antes de comenzar a trabajar con el palito de naranja.
- Empuja las cutículas. Toma el extremo plano o curvado del palito de naranja y empújalo suavemente hacia atrás sobre la cutícula. Hazlo con cuidado para evitar ejercer demasiada presión, lo que podría ser incómodo o incluso doloroso. El objetivo es empujar las cutículas para alejarlas de la base de la uña, no cortarlas.
- Limpieza alrededor de las uñas. Utiliza el extremo más afilado o puntiagudo del palito para limpiar cuidadosamente alrededor de los bordes de las uñas. Puedes eliminar cualquier exceso de esmalte o restos que hayan quedado en la piel alrededor de las uñas.
- Movimientos suaves. Realiza movimientos suaves y precisos alrededor de las uñas para evitar dañar la cutícula o la superficie de la uña. Evita presionar demasiado fuerte para no causar molestias ni dañar la piel.
- Hidratación. Después de terminar, aplica una crema o aceite hidratante para cutículas en tus manos y uñas para mantenerlas nutridas e hidratadas.