Helado con pepinillos, chocolate con queso, frutas a deshoras o un plato de pasta a las tres de la mañana… Seguro que te suena, porque si hay algo que caracteriza al embarazo, además de la barriga en crecimiento y las hormonas revolucionadas, son los antojos. Y aunque parezca un capricho sin sentido, lo cierto es que tienen una explicación mucho más lógica (y científica) de lo que imaginamos. En Primor te contamos por qué tienes antojos durante el embarazo.
Si estás embarazada o conoces a alguien que lo esté, seguro que has visto cómo ciertos alimentos se convierten en objeto de deseo absoluto, mientras que otros –antes favoritos– de repente generan rechazo. Pero, ¿por qué sucede esto?
Un mito sobre los antojos durante el embarazo
Hay un mito que siempre se ha extendido sobre los antojos durante el embarazo. Y es que son porque sí. Porque es natural que así sea. Incluso en algunos casos se dice que si se tiene un antojo tiene que ver con el bebé y sus necesidades. Pero esto no tiene mucho de verdad, vamos a ver cuáles son realmente las razones de tenerlos.
Por qué tienes antojos durante el embarazo: el papel de las hormonas
Todo empieza con las hormonas, esas pequeñas mensajeras químicas que controlan más cosas de las que nos gustaría. Durante el embarazo, los niveles de estrógeno y progesterona se disparan, afectando al olfato, al gusto y, por supuesto, al apetito.
- Hiperosmia: Algunas mujeres desarrollan un sentido del olfato más agudo (sí, por eso algunos olores resultan insoportables de repente). Esto puede influir en los antojos o en el rechazo a ciertos alimentos.
- Alteración del gusto: El embarazo puede cambiar la percepción de los sabores. Algo que antes te encantaba puede parecer insípido o demasiado intenso, lo que lleva a buscar nuevas combinaciones de alimentos.
Déficit nutricional: ¿el cuerpo pide lo que necesita?
Otro motivo por el que aparecen los antojos es la necesidad de ciertos nutrientes. Aunque no siempre es así, en muchos casos el cuerpo pide lo que le falta.
- Deseo de chocolate o dulce: Puede indicar una necesidad de magnesio o glucosa.
- Antojo de carne roja: Podría estar relacionado con una deficiencia de hierro o proteínas.
- Frutas o cítricos: En muchos casos, el cuerpo busca un extra de vitamina C o ácido fólico.
- Comida salada: Podría deberse a un déficit de sodio o simplemente a la necesidad de retener más líquidos.
Por qué tienes antojos durante el embarazo: factores emocionales y psicológicos
Los antojos no siempre responden a una necesidad física. El embarazo es una montaña rusa emocional y la comida también se convierte en una fuente de confort. El estrés, la ansiedad o simplemente la nostalgia pueden influir en lo que nos apetece comer.
- Los antojos de alimentos de la infancia pueden estar relacionados con la necesidad de seguridad y bienestar.
- Los cambios en el estado de ánimo pueden hacer que busquemos alimentos que generen placer inmediato (como el chocolate o los carbohidratos).
¿Qué pasa si los antojos son raros o extremos?
Si bien es normal desear combinaciones curiosas, en algunos casos el cuerpo puede experimentar pica, un trastorno que provoca el deseo de comer cosas que no son alimentos, como tiza, tierra o jabón. Esto puede indicar deficiencias nutricionales graves y siempre debe consultarse con un especialista.
Si quieres saber mi opinión..
Los antojos forman parte del embarazo, pero eso no significa que haya que darles rienda suelta sin control. La clave está en el equilibrio: darte un capricho sin descuidar la alimentación saludable. Y sí, disfrutar de un antojo es parte de la experiencia, pero tu cuerpo (y tu bebé) también necesitan los nutrientes adecuados.