Hoy en día existen múltiples activos que pueden ayudarnos en nuestro cuidado diario de la piel. Sin embargo, cada dermis es un mundo, y cada una de ellas necesita unos productos y activos adecuados frente a unas carencias específicas. En materia de ácidos, conviene andarse con pies de plomo para no abrasarnos la cara. Hay unos más suaves que otros que resultan igual de eficaces, el ácido succínico es una excelente opción.
Apto para todo tipo de pieles, este activo exfolia la piel, controla el sebo y, gracias a su poder antioxidante, aporta ese toque de glow que cualquier piel necesita. Veamos más en detalle todo lo que puede ofrecerte y cómo deberías incluirlo en tu rutina para disfrutar de todos sus enormes beneficios.
Qué es el ácido succínico
El ácido succínico es una sustancia natural que se encuentra en la caña de azúcar y también en el ámbar. Se describe como un tipo de ácido que tiene propiedades limpiadoras de los poros, calma la piel y proporciona hidratación.
Es especialmente adecuado para personas con piel grasa, lo que sugiere que puede ayudar a controlar la producción de sebo y mejorar la textura de la piel en personas con este tipo de piel. No obstante, también es un gran aliado en el cuidado de las pieles más delicadas.
Beneficios del ácido succínico
- Propiedades antiinflamatorias y antimicrobianas. Ayuda a inhibir el crecimiento de bacterias responsables de brotes de granos, lo que lo convierte en un excelente ingrediente para tratar imperfecciones, puntos negros y lesiones inflamatorias, combatiendo el acné sin dañar la barrera protectora de la piel.
- Estimula la renovación celular. Contribuye a mejorar el funcionamiento de las células de la piel, lo que puede ayudar en la regeneración y renovación de la misma.
- Acción antioxidante. Actúa como un antioxidante poderoso que combate el estrés oxidativo en la piel, promoviendo así un aspecto rejuvenecido y firme de la piel, manteniéndola protegida y con un brillo saludable.
- Control de la producción de sebo. Ayuda a controlar la producción excesiva de grasa en la piel, lo que lo hace beneficioso para las personas con piel propensa al acné.
- Hidratación. Su estructura es similar a la de los lípidos naturales de la piel, lo que le permite actuar como un hidratante efectivo, manteniendo la piel bien hidratada.
- Adecuado para pieles sensibles y reactivas. El ácido succínico es más suave en comparación con otros ácidos, por lo que es apto para personas con piel sensible y reactiva, ya que tiene menos probabilidades de causar irritación.
Qué tipo de pieles pueden usar el ácido succínico
Realmente, todas. Sin embargo, en cada una de ellas actúa de una manera diferente, haciendo que este ingrediente sea útil para:
- Piel grasa. Puede ser una excelente opción para personas con piel grasa, ya que ayuda a controlar la producción de grasa y limpiar los poros.
- Piel propensa al acné, ya que puede ayudar a tratar y prevenir los granos.
- Piel sensible, es más suave que otros tipos de ácidos, lo que lo hace menos propenso a causar irritación en personas con este tipo de piel.
- Problemas de envejecimiento. El ácido succínico es una opción para tratar líneas finas y arrugas en personas que desean abordar problemas relacionados con el envejecimiento de la piel.
Con qué activos puedo combinar el ácido succínico
- Ácido hialurónico. El ácido hialurónico es un excelente humectante que ayuda a mantener la piel hidratada. Combinar el ácido succínico con ácido hialurónico puede proporcionar una hidratación efectiva mientras se abordan otros problemas de la piel.
- Ácido salicílico. Si tienes piel propensa al acné, combinar el ácido succínico con ácido salicílico puede ser beneficioso. El ácido salicílico ayuda a exfoliar los poros y a prevenir la formación de brotes de acné, mientras que el ácido succínico puede controlar la producción de grasa y calmar la piel.
- Niacinamida (Vitamina B3). Conocida por sus beneficios para la piel, que incluyen la reducción de la inflamación, la mejora de la textura y el tono de la piel, y la reducción de la apariencia de los poros. Combinarla con ácido succínico puede ser útil para abordar múltiples preocupaciones.
- Retinoides. Los retinoides, como el retinol, son efectivos para reducir líneas finas y arrugas, así como para estimular la renovación celular. Sin embargo, pueden ser un poco fuertes, por lo que debes usarlos con precaución y según las indicaciones de un dermatólogo.
- Antioxidantes. Los antioxidantes como la vitamina C pueden ayudar a proteger la piel del daño causado por los radicales libres y promover la luminosidad de la piel. Puedes utilizar productos con antioxidantes en combinación con el ácido succínico para un efecto protector adicional.
- Péptidos. Los péptidos son ingredientes que pueden ayudar a estimular la producción de colágeno y mejorar la firmeza de la piel. Combinar péptidos con ácido succínico puede ser beneficioso para el cuidado anti-envejecimiento.