Ya han pasado las fiestas y con ellas, los excesos propios de estos días. Celebraciones con amigos y familiares acompañadas de un sinfín de sabrosas y exquisitas comidas que hemos disfrutado y saboreado con gusto y un consumo de alcohol quizá más elevado de lo habitual.
Ahora toca volver a la normalidad y debemos prestar atención a nuestro cuerpo. ¿Quién no se siente hinchado? ¿Quién no tiene sensación de pesadez? Tanto es así que seguramente hayamos empezado el año con algún que otro kilo de más.
No os dejéis llevar por el entusiasmo de las dietas milagro, pues nunca son aconsejables, ya que aunque pueda perderse peso de forma rápida, el efecto rebote está garantizado cuando se abandonan.
Desde Primor queremos daros ciertas opciones de alimentos atiinflamatorios y saciantes para estos días postnavideños con el fin de resetear vuestro cuerpo y echaros una mano para que os encontréis mejor.
Alimentos ricos en fibra, antioxidantes y nutrientes esenciales
Los productos de carácter ecológico , también llamados orgánicos o bio, son aquellos obtenidos de forma natural, sin la utilización o fumigación de productos químicos. El calabacín puede consumirse durante todo el año y está compuesto por gran cantidad de minerales y oligoelementos, además de potasio, magnesio, fósforo y calcio. Apenas contiene calorías, por lo que es un alimento perfecto para dietas de pérdida de peso.
El muesli es un alimento emblemático de la dieta natural y sana. Esta nutritiva y sabrosa combinación de cereales integrales, frutas frescas y secas y semillas junto con leches vegetales, aporta energía y un buen número de beneficios para la salud: la fibra insoluble refuerza el tránsito intestinal; la mezcla de fruta fresca y cereales beneficia a la flora.
Los cereales integrales aportan vitaminas del grupo B, esenciales para obtener energía de los alimentos; además, fortalecen el corazón y el sistema nervioso. De los frutos secos, las semillas y cereales integrales recibimos la antioxidante vitamina E, un poder antioxidante que se ve multiplicado por la provitamina A y el selenio de los copos de avena crudos. Cualquier muesli es rico además en hierro, calcio, fósforo, cobre y magnesio.
El arroz integral es una fantástica fuente de energía: proporciona vitaminas (sobre todo del grupo B: B1, B2, B6 y vitamina E), grasas (que nadie se asuste: grasas saludables y, por tanto, indispensables), proteínas y minerales, en especial potasio, fósforo y magnesio y en menor medida calcio, sodio y selenio. Y, por cierto, los celíacos pueden comer sin problemas porque no contiene gluten.
Nos gustaría ser tan robustos como un árbol, pero nuestro sistema inmunológico no siempre está a la altura. Para ayudarnos, la naturaleza nos ha regalado la acerola, cuya valiosa vitamina C se encarga de ayudar de manera natural a nuestras defensas. La infusión Inmunidad y Salud de Yogi combina esta fuerza natural con equinácea, que le da un toque ligeramente amargo, y naranja, que le da un delicioso sabor afrutado.
Toca comer bien. Esta selección de alimentos saludables puede ayudarte no solo a perder peso, sino también a que tu estómago, hígado y en general tu organismo se recuperen de los empachos navideños.
Equilibra tu dieta tras las fiestas: 10 claves
- Apuesta por comidas suaves, procura que sigan siendo sabrosas aunque ligeras para no convertir el momento de la comida en una tortura después de días de tantos excesos. Los caldos son una buena alternativa y los puedes cargar de muchos nutrientes añadiendo verduras ricas en vitaminas.
- Aunque reduzcas el consumo de pasta o arroz, recuerda que siempre puedes acompañarlos de verduras para hacer platos ligeros huyendo de complementarlos con salsas o con otros ingredientes cargados de calorías.
- En el caso del arroz, mejor si empleas arroz integral porque nos ayuda a reducir la hinchazón abdominal y evitar el estreñimiento.
- Las legumbres, siempre consumidas con cantidades controladas, aportan nutrientes, regulan los niveles de azúcar en sangre y nos ayudan a regular el tránsito intestinal. Un plato perfecto puede estar compuesto por un puñado de legumbres, vegetales y proteína. Saciará tu apetito y te dará energía, vitaminas y nutrientes para seguir tu ritmo.
- Sustituye los rebozados y frituras en aceite por platos elaborados en el horno o a la plancha.
- Mantén a raya el consumo de queso y lácteos o sustitúyelos al menos por sus hermanos más ligeros.
- Busca frutas que te gusten y te ayuden a mantener bajo control el impulso irrefrenable por los bocados dulces. Los caquis, las granadas, los frutos rojos, son magníficos para saciar esa sensación y además muy saludables.
- Ayuda a tu hígado a realizar su misión depurativa. Puedes hacerlo llevando crudités a la oficina para el momento del tentempié de media mañana. Y si te gustan las alcachofas aprovecha el momento. Son perfectas para evitar además las digestiones pesadas. Como fruta, ten manzanas a mano en el bolso o en el trabajo. Son un protector natural perfecto contra el estómago. Gracias a sus propiedades antiinflamatorias te ayudan a eliminar toxinas y líquidos.
- No dejes de tener en tu despensa espárragos. Su índice calórico es muy bajo sin embargo tienen grandes virtudes nutricionales. Mantienen limpio el torrente sanguíneo, mejoran la función renal y disminuyen la hinchazón. Pero ¡ojo! si tienes alto el ácido úrico porque aumenta sus niveles.
- Como consejo final, dedica un rato a ordenar tu despensa y tu nevera. Elimina los alimentos insanos y evita hacer la compra con el estómago vacío. Tampoco te saltes comidas, incluye proteína en el desayuno y evita llegar con ansiedad a la mesa manteniendo una rutina de almuerzos y meriendas ligeras y saludables.