El ayuno intermitente durante la menopausia puede ayudar a regular la ralentización del metabolismo que se da durante esta etapa de la vida de una mujer. Sin embargo, puede que te estés preguntando si es aconsejable practicar ayuno intermitente durante la menopausia.
En este artículo vamos a ver cuáles son los beneficios que puede traer a tu vida practicar el ayuno intermitente durante la menopausia, pero también algunos puntos que debes tener en cuenta para hacerlo con cuidado.
Ayuno intermitente durante la menopausia: precauciones
El ayuno intermitente es una práctica que se usa para mejorar el funcionamiento metabólico y digestivo. Por eso, puede haber mujeres que se sientan llamadas a practicarlo durante la menopausia. Sin embargo, hay que tener en cuenta otros puntos que pueden afectar en ese momento de la vida de una mujer, en el que se necesita tener cubiertos algunos nutrientes básicos.
Hay que tener en cuenta que durante la menopausia se pierde calidad ósea y la estructura del esqueleto se va debilitando, por ejemplo. Si no se tiene en cuenta este factor, el ayuno intermitente durante la menopausia puede ser peligroso.
El calcio y la vitamina D son claves durante esta etapa de la vida. También es bueno incluir en la dieta suplementos con magnesio a partir de la menopausia. Teniendo en cuenta estos factores, el ayuno intermitente durante la menopausia no tiene por qué ser perjudicial. Vamos a ver cuáles son los beneficios de esta práctica.
Ayuno intermitente durante la menopausia: beneficios
Una vez que hemos visto los puntos que es bueno que tengas en cuenta si quieres practicar el ayuno intermitente durante la menopausia, vamos a ver los beneficios que puede traer a tu salud y a tu vida esta práctica.
Mayor energía
Una de las primeras cosas que nota la gente que lo practica, es tener mayor energía física. Por eso, practicar ayuno intermitente durante la menopausia puede ser muy beneficioso si haces deporte y te gusta estar activa, ya que en esta etapa de la vida a veces se tiende a tener menos energía.
Mejor estado de ánimo
El estado de ánimo puede regularse con el ayuno intermitente en esta fase de la vida de una mujer. Algunos estudios sostienen que la producción de ciertas proteínas en el cerebro (como el BDNF), gracias al ayuno, apoyan la función cognitiva y ayudan a reducir los síntomas de depresión.
Mayor claridad mental
También se experimenta una mayor claridad mental cuando se practica el ayuno intermitente. Más aún si se eliminan harinas blancas, azúcares y lácteos de la dieta y se mantiene una base de verduras y frutas frescas, grasas saludables, proteínas magras y frutos secos.
Menor inflamación
El hecho de que el cuerpo se duerma teniendo que hacer la digestión, hace que se produzca inflamación. Esto hace que se reduzca el riesgo de enfermedades como la artritis, la diabetes y las afecciones cardiovasculares.
Mejora de la salud ósea
Como hemos dicho, la salud ósea decae en la menopausia. El ayuno intermitente ayuda a mejorar la salud metabólica y reducir la inflamación, por lo que también puede influir positivamente en la salud general del sistema óseo. No obstante, no hay que olvidar el calcio en la dieta y el magnesio.
Control de peso
También, otro de los problemas más comunes en la menopausia es el aumento de peso. De hecho el metabolismo se vuelve más lento debido a los cambios hormonales, por lo que el ayuno intermitente durante la menopausia ayuda también en esta cuestión.
Longevidad celular
Otro de los factores muy interesantes en los que el ayuno intermitente durante la menopausia ayuda a las mujeres, es este. Esta práctica activa la autofagia, un proceso en el que el cuerpo elimina células dañadas, favoreciendo la regeneración celular y promoviendo una mayor longevidad celular.