Tener hemorroides es un problema que muchas veces se tiene que sufrir en silencio. Aunque vemos constantemente anuncios en televisión sobre productos que ayudan a atenuar este problema, lo mejor ante una afección de este tipo es conocer la raíz. Al conocer y atajar la raíz del problema, los síntomas se atenúan normalmente y, en el mejor de los casos, ¡el problema desaparece!
Hoy te contamos qué son las hemorroides, por qué aparecen y cómo se puede evitar este problema que en muchos casos trae limitaciones en la vida cotidiana.
Qué son las hemorroides
Puede que muchas veces te hayas hecho esta pregunta. Bien porque sufres de hemorroides y, aunque conoces su aspecto por fuera, desconoces lo que son realmente a nivel médico o bien porque no sabes lo que son.
Las hemorroides son venas que se hinchan en la parte inferior del recto y el ano, por eso suelen ocasionar molestias a la hora de ir al baño o asearse principalmente. Son parecidas a las venas varicosas y pueden causar desde picazón hasta molestias y síntomas más graves como el dolor o el sangrado cuando van a más.
Por qué salen las hemorroides
No existe solo una causa que haga que salgan las hemorroides, sino que más bien son varias y hay que analizar cuál puede ser la causa de cada persona que las sufre. Ya lo hemos dicho, localizada la causa muchas veces, se resuelve el problema con éxito. Estas son las causas más comunes de las hemorroides:
- Esfuerzo al defecar: porque aumenta la presión en las venas del recto y hacen que se empiecen a hinchar y aparezcan los síntomas que hemos citado antes.
- Estreñimiento: cuando se tiene estreñimiento, el punto anterior es constante, por lo que las hemorroides pueden convertirse en algunos casos incluso en un problema crónico o muy recurrente.
- Embarazo: porque el útero se agranda y presiona las venas del recto, lo que también puede causar hemorroides.
- Exceso de peso: porque, al igual que en el caso anterior, puede producir presión adicional en la región pélvica y rectal y hacer que terminen apareciendo hemorroides.
- Estar sentada muchas horas: la postura sentada si es durante muchas horas al día, también puede aumentar la presión en las venas anales. Especialmente si hay un gran peso que el cuerpo tenga que sostener.
- Levantar objetos pesados: sobre todo si se hace a diario o por motivos de trabajo, estos esfuerzos también pueden repercutir en las venas de la zona y causar hemorroides.
- Factor genético: hay personas que tienen una predisposición genética a desarrollar hemorroides, al igual que ocurre cuando se heredan otro tipo de enfermedades del clan familiar.
Cómo evitar que salgan hemorroides
Y una vez que hemos visto las causas principales por las que salen hemorroides, vamos a ver cuáles son algunos tips para evitar que salgan:
- Hacer ejercicio regular: porque el ejercicio reduce la presión sobre las venas, además de contribuir al control del peso, que es otra de las causas que provocan hemorroides en algunas ocasiones.
- No estar mucho tiempo sentada: si trabajas frente al ordenador, puedes levantarte frecuentemente y hacer breves descansos para no estar siempre en la misma postura.
- Una dieta rica en fibra: porque esto hará que vayas al baño con facilidad. La fibra ayuda mucho al tránsito intestinal y una de las causas principales de las hemorroides es la dificultad para defecar.
- Beber agua abundante: porque, además de ser muy importante para la salud en general, es crucial para conseguir que se ablanden las heces y así ir al baño regularmente sin tener que hacer esfuerzos extra.
- No hacer esfuerzos al defecar: o hacer los menos posibles. Sobre todo si las hemorroides son un problema crónico, es preferible tomar suplementos que ayuden al tránsito intestinal e, incluso, en situaciones muy graves recurrir a laxantes.